15 marzo 2012

Si seremos tontas...

Hoy, por fin, he terminado con las últimas fermentaciones: ¡qué felicidad tan grande de fregar los cacharros y desencufar la estufa! He sobrevivido a mi primera jornada de vocal de elcciones de Director de Escuela: 5 horas para que de 504 alumnos de la Escuela hubiera 14 votos, uno de ellos nulo, el resto para el único candidato (por cierto)... Ha sido el primer día que he comido en el Edificio de Comedores, normalmente si me quedo a comer, me llevo un bocadillo rápido o compro uno en la cafetería, pero hoy tenía un vale por las elecciones. La comida asquerosa, la peor que he probado en cualquier universidad. Al entrar en Comedores, salía un grupo de chicos y oigo el siguiente trozo de conversación: Solo podía mirarle las tetas, y es que me la tiraba... Ya no he oído más. No conozco al que hablaba (no he visto su cara), ni a quienes hablaba, ni de quien hablaba, pero conociendo la moda de ir escotadas, con la ropa prieta, y los pantalones bajos enseñando lencería por arriba y por abajo, solo he podido pensar: Si seremos tontas... (y no digo si seríamos por pura pena...)

3 comentarios:

  1. Sin que esto invalide lo que dices: No hace falta ir escotada para que los tíos digamos esas cosas.

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    1. En ese caso, que sé que pasa, el problema no lo tenéis vosotros, y a nosotras nos hacéis sentir incómodas.

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