14 enero 2025

Desde el barro #9 Lo más hondo

Quiero forzarme a no olvidar. Hace hoy once semanas que la DANA se llevó por delante tantas, demasiadas vidas. Quiero no olvidar que las supervivientes siguen bregando por volver a una nueva "normalidad". Y me lo voy a recordar cada semana los martes de la mejor forma que se me ocurra.

Esta semana vuelvo a mis (a)poemas. Este dedicado a Rubén e Izán y sus padres. Porque su historia me partió tanto que al fin fui capaz de llorar lo que no había llorado antes. Tuneé el Salmo 130 para que sus palabras representaran ese gemido que sentía tan dentro de mí.

Vía BBC


LO MÁS HONDO

Salmo 130 (129)


A flor de piel, un escudo ligero me

permite ser mínimamente funcional.

En cambio, el sollozo y la angustia

por los niños de Torrent -Rubén e Izán-

venían de más adentro. Desde lo más 

hondo, sacudieron mis cimientos, era

el dolor hecho carne y en carne viva

(es que ya no nos cabe más dolor).


Te pido que escuches este clamor

aunque no atraviese del todo mi 

coraza. Porque si tú fueras sordo,

a quién iremos: solo tú tienes 

palabras de vida eterna. Solo tú.


No te sé decir si te anhelamos más

que el centinela a la aurora… Quizá sí

que te esperábamos por encima del fin 

de la alerta de protección civil.

Buscándote más que el cese de la lluvia 

y que no lloviera sobre mojado,

sobre tanto barro todavía sin secar.


Por eso, es posible que te aguardáramos 

ante la vela encendida, sin palabras ya 

que decir en voz alta -tampoco 

en voz baja-. Con la mano dudosa

en rasgar las cuerdas del ukelele.

La mente un poco en blanco. Solo mirando. 

Queriendo esperar, si era preciso, 

¡contra toda esperanza! Esperar en el 

Dios Rico en Misericordia, pues en él 

está el amor y de él nos viene la salvación.


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