15 octubre 2012

La originalidad no existe (la agotaron los griegos)

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En busca de si es posible o no una moralidad universal (tema recurrente en mis conversaciones con @DrLitos), me recomendaron vía Twitter leer el Gorgias de Platón, y aunque al principio se me hizo pesado (y más porque Socrates se repite más que un loro), he acabado leyendo también Fedón o la inmortalidad del alma y El Banquete o el amor. Mi conclusión principal es la que da título a la entrada, y es que el libro con todos los siglos a cuestas es de rabiosa actualidad, y sería muy interesante que nuestros políticos tuvieran el nivel de leerlo y aplicárselo en circunstancias. Por medio de argumentos sencillos, Socrates desmitifica la función de la retórica dejándola al desnudo como la técnica de embaucar y adular, porque Gorgias no enseña lo que es justo, eso debe llevarlo el alumno bien aprendido de antes. La defensa apasionada de Callicles acerca de asegurarse una vida sin problemas cuadra a la perfección con el super-hombre de Nietzsche. Lo que me hace recordar que este filósofo moderno criticaba por igual las virtudes de débiles del cristianismo y de los griegos. Pone los pelos de punta leer la definición del hombre perfectamente justo que Platón pone en boca de Socrates: porque dado que padecer la injusticia no es un mal comparable a hacerla, acaba describiendo la figura de la Pasión de Jesucristo, ¿quién lo iba a decir cuatro siglos antes de Cristo?

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Pero los argumentos de Socrates, ¿nos convencen? Me temo que en nuestra época relativista, muchos negarían la existencia del alma y no servirían de nada las palabras pronunciadas por el filósofo griego. De hecho, en Gorgias, ¿podemos intuir una profecía en la reprensión de Callicles o bien solo una constatación de lo que ocurrió? La filosofía no le sirvió a Socrates en su juicio, como nos muestra Fedón, aunque Socrates la valore por la salvación de su alma, pero es que ¿hay alguien en pleno siglo XXI que acepte la vida tras la muerte, con el juicio o el castigo? En cualquier caso, es una lectura interesante, y recomendable en tiempos de crisis.

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