La
electrosíntesis orgánica puede ser usada para reemplazar agentes oxidantes y
reductores tóxicos o peligrosos, reduciendo el consumo energético, y puede
usarse para la producción in situ de agentes peligrosos o inestables.
Como la energía de los electrones se
puede controlar con un voltaje aplicado, la mayoría de las reacciones
electrosintéticas tienen lugar a temperatura ambiente. Los electrodos se
consideran como catalizadores heterogéneos que pueden quitarse fácilmente al
final de la reacción. Actualmente, en electroquímica se emplean líquidos
iónicos, que se recuperan para eliminar los riesgos de contaminación y reducir
los costes. El uso de catalizadores redox y reacciones mediadas por electrones
permite reducir la concentración de reactivos utilizados en química orgánica
tradicional, preservando la selectividad de la reacción.
Durante una reacción electroquímica
las moléculas orgánicas son activadas por la adición o abstracción de
electrones en la superficie de un electrodo a través de un proceso catalítico
heterogéneo. La energía de los electrones en el electrodo puede ser modificada
por medio de un suplemento de potencia. La adición de un electrón del cátodo
dentro del orbital LUMO de la molécula, provoca su reducción. El proceso
inverso ocurre en el ánodo: la abstracción de electrones del HOMO produce la
oxidación. Las reacciones electroquímicas de compuestos orgánicos son la
combinación de dos sucesos: un proceso heterogéneo de transferencia con la
molécula (abreviado por el símbolo E) ocurre en la superficie del electrodo y
lleva a la formación de un reactivo intermedio (un catión radical o anión
radical), y un proceso químico (C) que ocurre en disolución. Los procesos
pueden ser repetidos y/o combinados para dar diferentes secuencias como EE, EC,
CE y ECE.
http://chemistry.umeche.maine.edu/CHY252/HomLum7.jpg |
Otra ventaja de la electrosíntesis
orgánica es que el estudio preliminar electroanalítico de la reactividad de las
moléculas de interés puede hacerse de manera simple y rápida usando la
voltametría cíclica (CV) y colorimetría. De estos estudios es relativamente
fácil saber qué grupos funcionales serán oxidados o reducidos. Para proponer un
mecanismo de transformación redox son necesarios estudios complementarios que
usan técnicas analíticas que son comúnmente usadas en el campo de la química
física orgánica.
http://www.iie.org.mx/publica/bolnd97/imagen/fig6apli.gif |
Los procesos de transferencia de
electrones pueden resultar en la inversión de la reactividad de un grupo
funcional (umpolung), cuando compuestos ricos en electrones y oxidados
se transforman en compuestos electrón-deficientes, y los nucleófilos son
convertidos en electrófilos. De manera parecida, la reducción convierte centros
electrón-deficientes en sitios reactivos nucleófilos. Esta es una de las
principales estrategias usadas en la síntesis de moléculas complejas. Para
transformaciones industriales se requiere electrolisis galvanoestática.
Las ventajas de la electrosíntesis
orgánica son la selectividad de la reacción que se puede controlar con el
potencial aplicado al electrodo de trabajo, el control de la velocidad de
reacción por ajuste de la densidad de corriente o del potencial aplicado y que
se puede conocer el grado de transformación de una molécula (en cuanto a su
estado de oxidación) por el consumo de carga. Además, la naturaleza del
electrodo y la composición del electrolito se pueden usar como parámetros para
controlar la selectividad y la velocidad de la reacción. Las condiciones experimentales
electrosintéticas y los mecanismos se pueden predecir por las bases de las
técnicas electroanalíticas. Las condiciones de reacción son suaves en general,
ya que se llevan a cabo a presión atmosférica y temperatura ambiente. Los
electrones son reactivos amigables con el medioambiente.
Presenta también una serie de
desventajas que se pueden resolver. Se requieren celdas electrolíticas (ahora
se puede usar el vidrio u otros materiales de laboratorio, además de baterías y
fuentes de potencia que permiten acceso a técnicas galvanoestáticas). Las
reacciones electroquímicas se producen en los electrodos y son, por tanto,
procesos heterogéneos. Como tienen lugar en la interfase electrodo-electrolito,
pueden ser más lentas que las reacciones en fase homogénea por lo que se usan
electrodos de alta área superficial, agitación, o mediadores que son portadores
de electrones entre el electrodo y el sustrato (por ejemplo, la electrolisis
indirecta), así se consigue una fase homogénea.
El transporte de carga a través de la disolución requiere un medio
iónico de alta conductividad, por lo que se necesita usar un electrolito. El
uso de emulsiones acuosas es una estrategia prometedora. La recuperación del
electrolito puede suponer problemas técnicos e incrementar los costes. El
problema se minimiza usando celdas de micro-flujo, que tienen una distancia
pequeña entre electrodos. De esta a manera se puede generar el electrolito in
situ (con un ánodo sacrificial, ácidos sólidos soportados o bases en la
celda electroquímica). En algunas reacciones electroquímicas la división de
celdas por un separador dan una alta resistencia al transporte de carga. Se
emplean membranas conductoras de baja resistencia como el Nafion, para
solventarlo.
http://www.psrc.usm.edu/mauritz/images/Nafion3.jpg |
A continuación, siguiendo a Frontana-Uribe
et al. (2010) se detallan los tipos de reacciones electroquímicas orgánicas,
con ejemplos, y también algún caso de aplicación inorgánica.
1. Reacciones electroquímicas
apareadas:
cuando tiene lugar una reacción electroquímica en un electrodo, debe haber
simultáneamente otra en el contra-electrodo, por lo que se puede aprovechar
para que los compuestos formados en cada electrodo sean valiosos y útiles. En
un caso ideal supondría un rendimiento electroquímico combinado (entendiéndolo
en el contexto de moles de productos por unidad de carga) mayor del 200%,
siendo la suma del rendimiento de los dos procesos de los dos electrodos.
Pueden ser paralelas, convergentes, divergentes o lineales. Estas reacciones
evitan la generación de residuos tóxicos, permiten un uso más eficiente de la
corriente eléctrica, los costes son bajos y se consigue una alta economía
atómica.
2. Reacciones electrocatalíticas o
electrolisis indirecta: se caracterizan por el uso de un catalizador redox
electrogenerado in situ. El catalizador es regenerado en el electrodo y
solo se usan pequeñas cantidades de agente redox. Así se pueden usar compuestos
que en gran cantidad resultarían tóxicos. Este catalizador redox también se
denomina mediador o portador de electrones. Los mediadores tienen que tener
algunas características: la capacidad de ser reciclados, buena estabilidad en
los dos estados de oxidación, transferencia fácil de electrones del electrodo
al mediador (cinética electroquímica rápida), rápida transferencia del mediador
al reactivo, y fácil separación de los productos.
3. Reacciones en líquidos iónicos: los líquidos
iónicos, tienen algunas propiedades útiles para electroquímica como la alta
conductividad iónica, la no volatilidad y la baja inflamabilidad, frente a la
baja constante dieléctrica de los disolventes orgánicos convencionales y los
riesgos de volatilidad e inflamabilidad que presentan estos últimos. Los iones
disueltos en soluciones acuosas constituyen la mezcla electrolítica más
económica y práctica, pero muchas sustancias orgánicas no son solubles en agua.
Se han usado disolventes polares con grandes cantidades de sales de amonio
cuaternarias, pero es más sencillo y barato emplear líquidos iónicos.
http://quimica.laguia2000.com/wp-content/uploads/2010/08/LIQUIION1.gif |
Los líquidos iónicos se pueden
recuperar eficientemente porque no son volátiles, se pueden reciclar y
reutilizar en reacciones futuras subsiguientes. Su electroactividad suele estar
condicionada por la presencia de agua o de impurezas. Un ejemplo de
aplicaciones es la electrofluorinación anódica selectiva de moléculas
orgánicas. En este caso, los líquidos iónicos no solo son disolvente sino
fuente de flúor. Otra aplicación es la formación de carbonatos a partir de
alcoholes y dióxido de carbono.
Según Estager et al. (2012), también
se pueden sintetizar nanopartículas en los líquidos iónicos. Los líquidos iónicos conteniendo metales (especialmente los
clorometalatos) se usan ampliamente en catálisis ya sea en el laboratorio como
a escala industrial. También se pueden usar para síntesis inorgánicas,
incluyendo la preparación de nanoestructuras. Se puede hacer la síntesis en un
solo paso de nanopartículas de indio (0) en términos de reducción
electroquímica a temperatura ambiente de un líquido iónico de haloindato (III).
Inicialmente, el indio es electroquímicamente reducido a indio (I) según estas
reacciones:
[InCl4]-+ 2e-→ [InCl2]-
+ 2Cl
-
2Cl- -2e- →Cl2
Seguidamente,
el indio desproporciona a indio (0) e indio (III) en el electrolito. La
reacción global es la siguiente:
3 [cation][InCl2]→ 2 In0 + [cation][InCl4] + 2[cation]Cl
4.
Reacciones usando reactivos electrogenerados: suelen tener
una corta vida media, y se generan en las superficies electrodo-disolución,
inmediatamente después de la reacción de transferencia electrónica. En el caso
de ácidos electrogenerados el área alrededor del ánodo es ácida, mientras que
la mayor parte de la disolución permanece neutra. Ejemplos de este tipo de
reacciones son la electrogeneración de superóxidos, de intermedios que
contienen S2+, el uso de iones halogenados (X+) como
oxidantes en síntesis, ácidos electrogenerados y bases electrogeneradas.
Un ejemplo más concreto podría ser
la oxidación electroquímica de catecoles en presencia de nucleófilos y se han
sintetizado varios catecoles de heterociclos sustituidos. Las o-benzoquinonas
generadas electroquímicamente in situ se pueden usar como aceptores de adición
de Michael y pueden reaccionar con α-oxoheterociclocetena
N,N-acetales para sintetizar α-aril α-oxoheterociclocetena
N,N-acetales conteniendo un anillo aromático rico en electrones (Cheng-Chu et
al., 2009).
5.
Reacciones electroquímicas que usan materiales primas
renovables (biomasa)
6.
Electrosíntesis orgánica en micro- y nano-emulsiones
•
Microemulsiones: alternativa para resolver la baja
solubilidad de disolventes orgánicos en agua, produciendo una emulsión que
consiste en el reactivo orgánico y agua (se estabilizan por medio de un
surfactante y un co-surfactante). Las microemulsiones también se pueden generar
mediante ultrasonidos y así se puede evitar la adición de surfactante.
•
Nanoemulsiones
http://mrsec.wisc.edu/Edetc/nanolab/CdS/images/micelle.jpg |
La ventaja principal
de usar la electrosíntesis en estos casos es que el disolvente principal es el
agua. Como ya se ha dicho se pueden usar conjuntamente con otras técnicas como
los ultrasonidos, y en el caso que se describe a continuación con la ablasión
de láser.
Las nanoestructuras de polioxometalato (POM) son
interesantes porque pueden formar nanoclusters. La síntesis por el método ECLAL
(electroquímica y ablasión de láser del medio líquido) tiene tres ventajas: es
una síntesis sencilla y limpia porque las materias primas son simples, no se
requiere catalizador y se reduce la formación de subproductos. Además, se
emplean condiciones ambientales y se pueden diseñar distintas nanoestructuras
por combinación de distintos sólidos (metales o semiconductores), electrodos,
y disolución madre (no solo agua sino
también otros líquidos orgánicos o iónicos). Para conseguir los POM, primero se
realiza la ablación del láser en el líquido donde se genera un plasma en la
interfase entre líquido y sólido, que contiene iones Mo y otras especies a alta
temperatura, alta densidad y condiciones de alta presión. El agua desionizada
en torno al plasma se ha ionizado en especies de H y O, OH, etc., que se pueden
combinar con el Mo en el plasma formando óxidos. Después se produce la reacción
electroquímica, donde el ánodo de cobre es electrolizado a un voltaje asequible
formando iones Cu fácilmente solubles en el ambiente líquido. Para la
fabricación de la nanoestructura, el efecto del campo eléctrico provoca la
electroforesis de los iones cobre en la disolución que reaccionan con las
especies activas de Mo del plasma. Además, los pulsos incidentes del láser
hacen que se combinen ambas. La elección de la nanoestructura se consigue por
control del campo eléctrico (Liu et al., 2011).
Para concluir, el método
electroquímico se ha demostrado que sirve pero no todas sus reacciones son
competitivas con los métodos convencionales. Sin embargo, se pueden combinar
ambos tipos de metodologías para conseguir una química sostenible.
Este post participa en la XVI Edición del Carnaval de Química, alojado por Dr. Litos en el estupendo blog de divulgación ¡Jindetrés, sal!
Este post participa en la XVI Edición del Carnaval de Química, alojado por Dr. Litos en el estupendo blog de divulgación ¡Jindetrés, sal!
Bibliografía:
A Facile Synthesis of α-Aryl α-Oxoheterocyclic
Ketene N,N-Acetals Bearing an Electron-Rich Catechol
Subunit–An Electrochemical Oxidative Approach, Cheng-Chu Z., Da-Wei
P.,Yi- Sheng X., Li-Ming H. y Ru-Gang Z.,
Eur. J. Org. Chem. 2009, 5832–5840
Organic
electrosynthesis: a promising green methodology in organic chemistry, Frontana-Uribe B., Little
R. D. , Ibanez J. G. , Palma A. y Vasquez-Medrano R., Green Chem., 2010, 12, 2099–2119
Electrochemical Synthesis of
Indium(0) Nanoparticles in Haloindate(III) Ionic Liquids, Estager J., Nockemann P., Seddon K. R., Srinivasan G., y
Swadz´ba-Kwas´ny M., ChemSusChem 2012, 5, 117 – 124
A
General Strategy To Fabricate Simple Polyoxometalate Nanostructures:
Electrochemistry- Assisted Laser
Ablation in Liquid, Liu P., Liang Y., Lin X., Wang C., y Yang G., www.acsnano.org Vol. 5 No. 6, 2011, 4748–4755
Las microemulsiones son termodinámicamente estables, se forman espontáneamente, no con ultrasonidos. Se ocupa el surfactante. Si se aplica energía en cualquier forma (como ultrasonidos), se trata de una nanoemulsión.
ResponderEliminarGracias por el comentario! Lo escribí hace tiempo y no recuerdo la fuente de la que lo saqué :P De todas formas, es un tema que quiero investigar :)
EliminarLas microemulsiones son termodinámicamente estables, se forman espontáneamente, no con ultrasonidos. Se ocupa el surfactante. Si se aplica energía en cualquier forma (como ultrasonidos), se trata de una nanoemulsión.
ResponderEliminar